¿En qué momento decidiste que lo tuyo era la enseñanza y la divulgación?

Mi vocación docente apareció en mí muy joven. Daba clases particulares desde los quince años y, mi primera vez, con mi alumna Pepa, fue definitiva para este camino. Si bien, todo se enderezó mucho más cuando hice el Curso de Adaptación Pedagógica y realicé prácticas en el colegio La Visitación, donde después estuve trabajando durante siete años de responsable del aula de atención a la diversidad en secundaria.

La divulgación surgió después, unida a la labor de alfabetización científica que realizo en Espiciencia. Pertenezco a la plataforma Scenio de la cátedra de cultura científica de la UPV y a la unidad de cultura científica de la UBU y a raíz de mis trabajos con ellos, aparecieron más oportunidades de desarrollarme y formarme profesionalmente en este sentido.

 

Has recibido el STG Award 2023 por tu proyecto Espiciencia. ¿Qué es Especiencia y cómo surge?

Espiciencia nace en el año 2010 en Espinosa de los Monteros, una localidad de 1700 habitantes de la comarca de las Merindades (Burgos), situada en las estribaciones de la cornisa Cantábrica.

Es una comunidad de aprendizaje científico-tecnológico que brota en sus inicios como una iniciativa personal y se ha convertido en una ESCUELA INTEGRAL E INTERDISCIPLINAR DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA que sigue la METODOLOGÍA STEAM, en la que, utilizando el APRENDIZAJE BASADO EN PROYECTOS, el APRENDIZAJE BASADO EN INDAGACIÓN, el DESIGN THINKING, las propuestas de CIENCIA CIUDADANA

y la DIVULGACIÓN CIENTÍFICA, unimos nuestras fuerzas para llegar a nuestros objetivos:

• PALIAR LAS DIFERENCIAS DE OPORTUNIDADES DE ACERCAMIENTO A LA CIENCIA ENTRE LOS

ESCOLARES DE ZONAS RURALES Y URBANAS (clases EI, EP, ESO, formación del profesorado y padres)

• Incentivar la PARTICIPACIÓN DE LOS ESCOLARES DE LAS ZONAS RURALES en ACTIVIDADES DE

ÁMBITO CIENTÍFICO (ferias de ciencias, museos, talleres interactivos)

• Favorecer la ALFABETIZACIÓN CIENTÍFICO-TECNOLÓGICA de los niños, jóvenes, sus familias y toda la comunidad.
• Estimula el TALENTO Y LAS VOCACIONES STEAM en el medio
• Realizar INVESTIGACIONES REALES utilizando recursos locales y tuteados por personas de la

Siguiendo nuestro lema “Ciencia en todo y para todos”, hemos conseguido llevar el conocimiento científico y tecnológico a los niños y familias de toda la comarca y atravesar sus fronteras, aunando esfuerzos para solventar las brechas educativas que nos hemos ido encontrando.

El acercamiento a la ciencia es un derecho universal y así versa en la Carta de los Derechos Humanos (art.27). Conseguir que la ciencia entre en sus casas y se convierta en una herramienta para ser ciudadanos más críticos, más saludables, más empáticos y más humanos, es una virtud de nuestra escuela.

Trabajamos con niños desde los 3 hasta los 18 años, acompañándolos en este proceso de hacer de la ciencia algo conocido, amado y útil.

En nuestras aulas hay niños y niñas con diferentes capacidades, conformando grupos heterogéneos, donde cada uno es importante, es especial, tiene mucho que aportar.

La ciencia no tiene edad, y así lo demuestra nuestro proyecto con las personas mayores de Cáritas Parroquial, una experiencia intergeneracional que mejora el capital científico de nuestros abuelos y favorece la interacción de estos con las nuevas generaciones.

También hemos conseguido abrir a nuestro alumnado al mundo, incluyéndolo en redes internacionales como Scientix o Milset, estableciendo conexiones y colaboraciones por todo el mundo.

A fecha de hoy, somos el único centro educativo de España y el único de educación no formal de Europa en obtener el nivel Expert de la STEM School Label de la Europenan Schoolnet y la Comisión Europea.

Somos la referencia para la puesta en marcha del proyecto Dinamizadores STEM de la Fundación Margarita Salas, que está multiplicando y replicando nuestras acciones por todo el país.

Con medios reducidos, apoyo de las familias y de algunos mecenas comarcales, hemos conseguido desarrollar trabajos de investigación premiados regional, nacional e internacionalmente, en concursos y ferias de ciencia de todo el mundo.

Todo lo que empezamos lo terminamos, nadie se queda atrás.

 

¿De dónde viene tu compromiso con el medio rural?

En el medio rural ha nacido mi familia, mi matrimonio, mis tres hijas, mi escuela. Se lo debo todo.

Vivir en un pueblo ha supuesto para mi descubrir una nueva forma de vida, una mejor forma de vida. Me veo en la obligación moral de devolver a esta comunidad, a esta comarca, todo lo que ellos han hecho por mí.

 

¿Qué falta para que podamos seguir impulsando a las comunidades rurales, rejuvenecerlas o no obligar a sus jóvenes a marcharse?

Motivación, emprendimiento, ojos para ver y oídos para escuchar. El medio rural está lleno de oportunidades, de cultura, de historia, de patrimonio, de ciencia; sólo hay que darse la oportunidad de descubrirse a uno mismo dentro de él.

Políticamente, necesita de inversión en necesidades reales: educación, servicios sociales, transporte y movilidad y capacidad de cooperación con el ámbito urbano.

Fortalecer las oportunidades de empleo y formación para que la juventud se realice y descubra que en el campo se vive mejor.

 

Como mujer STEM, ¿qué crees que está fallando para que solo una mínima parte de las jóvenes sientan interés por la ciencia y la tecnología?

La desvinculación de las STEM con sus intereses en una etapa de su vida en que la significancia de los contenidos es vital. Que ellos mismos comprueben la existencia de ese nexo entre ciencia y tecnología y la necesidad de este conocimiento para convertirse en ciudadanos más críticos y humanos, es una de las soluciones más efectivas constatado por la evidencia en investigación didáctica.

 

¿Qué le dirías a las niñas para invitarlas a dedicarse a una profesión STEM?

Su visión empática, pragmática y creativa de las STEAM es imprescindible para el desarrollo de una sociedad más cultivada y más avanzada.